Despedidas :)

Tenía esta entrada pendiente desde hace ya unos cuantos días. Os extrañaréis de que haya una carita sonriente al lado del título siendo este "despedidas"... reconozco que, en parte, es raro. Pero es que esta despedida, aparte de no ser definitiva, ha sido genial.

El día 24 de este mes me voy a Birmingham de Erasmus, y el destino de mi amiga Fani es Worms. Estaremos unos cuantos meses lejos de toda la gente a la que queremos y que nos quiere: familia, amigos, parejas. Es un momento un tanto extraño en la vida de un estudiante, o al menos lo está siendo para mí. Las ansias de conocer un nuevo mundo compiten contra las inseguridades y la certeza de que echaremos demasiado de menos ciertas cosas, a ciertas personas.

Y, sin embargo, este maravilloso grupo de amigos que tenemos Fani y yo en común ha decidido no sólo que la perspectiva de irse sea mucho más liviana, sino que, además, hemos de marcharnos con una sonrisa. Y es que, como es habitual en ellos, ¡la han armado! Imaginaos que os citan a una hora en un sitio, sin un propósito concreto. Os vendan los ojos y os suben a un coche. Os llevan a dios sabe dónde y os hacen bajar una calle y varios escalones, aún con los ojos vendados. Y allí te los encuentras a todos -a casi todos, nos faltaba la pareja viajera-, con un enorme cartel de despedida, una mesa llena de cosas ricas, una piñata y un kit de supervivencia. Aunque mejor que imaginarlo es verlo en fotos, desde luego.



La mesa y el cartel, todo debajo de una parra, ¡qué romántico! Incluso se aventuraron a cocinar tartas y preparar una parrillada, eso no tiene precio.



El curioso invento de la piñata.



Abriendo nuestros sets de emergencia con los novios vigilantes detrás. El papel higiénico no tiene precio, tampoco el huevo kinder :)



Fani de rosa, yo de azul. Las viajeras con las camisetas que nos hicieron para la ocasión. La parte de atrás lleva el nombre de todos ellos, las frases de delante son bromas personales.



Un dulce beso de cacahuete de mi amado Vodevil.



¡Las chicas! Si no me equivoco, en este momento actuábamos como las Spice Girls. ¿No es cierto que tengo unas amigas preciosas?



Unos cuantos de nosotros, entre sidra y canciones ridículas.



La camiseta y el kit de emergencia. Contenía chocolate, un huevo kinder, una "peli para llorar" (la mía, como no podía ser de otra forma, ¡era Moulin Rouge!), horquillas para el pelo (todos sabemos la manía que tienen de perderse), kleenex, tiritas, papel higiénico, una lata de atún, la camiseta personalizada y un "vale por un regalo sorpresa".

Después de esto sólo puedo decir que, a partir de este momento, empezarán a gustarme demasiado las sorpresas, aunque en un principio me diesen cierto miedo. También he decidido, como es lógico, que tengo a mi lado al mejor grupo de amigos que pueda imaginar, que no importa qué ocurra, no importa lo lejos que estemos... yo os querré siempre, bajo cualquier circunstancia.

GRACIAS. Gracias de todo corazón. A todos.

2 comentarios:

Flame dijo...

Anda cómo mola :)

Eso sí son amig@s, un besote enorme Tricia.

Pd: quiero verte antes de que marches.

Tamara Ferrero dijo...

Pues nada Koi, un placer, cuando vuelvas aqui estaremos, al menos por la parte que me toca.
Siempre es mejor desedirse con una sonrrisa que no con lagrimas.
Un fuerte abrazo:
Tammy.

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